El conmovedor poema que se lee en la pequeña celda, fue la parte final del curso Ciencia Política de la maestría de periodismo de la UPSMP con Santiago Mariani. “Si lloran les subo puntos”, nos advirtió el talentoso Santiago. Antes habíamos visto un documental sobre el uso del rugby como elemento integrador de la complicada sociedad sudafricana. El llanto, luego de leerle el poema a mi hijo, tiene que ver con la conmovedora vida de Mandela, pero también he pensado mucho en la complicada sociedad peruana. Mi llanto fue por mi familia, migrantes todos, que lucharon y luchan finalmente por sobrevivir. Fragor en el que quedaron mi vieja y mi hermana, víctimas de esta complicada sociedad. El llanto también fue por mi hijo que tuvo que irse del país porque por aquí la cosa es complicada.
Aquí la secuencia de la película Invictus y el poema de William Ernest Henley. Hay que verla. Está buena.
Más allá de la noche que me cubre,
negra como el abismo insondable,
doy gracias al dios que fuere
por mi alma inconquistable.
En las garras de las circunstancias
no he gemido ni llorado.
Sometido a los golpes del destino
mi cabeza sangra, pero está erguida.
Más allá de este lugar de ira y llantos
donde yace el horror de la sombra,
la amenaza de los años
me halla, y me hallará sin temor.
No importa cuán estrecho sea el camino,
ni cuán cargada de castigos la sentencia,
soy el amo de mi destino,
soy el capitán de mi alma.
1 comentario:
Me ha encantado tu post, me ha hecho recordad varias cosas que dejo de lado por un "tu no puedes" o "tu no estas listo", gran poema si lo he escuchado varias veces y he visto la película INVICTUS es una de mis favoritas por su mensaje profundo
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